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El presidente Javier Milei dio una muestra en estos días de que toma nota sobre el deterioro de la economía doméstica de los argentinos, casi al mismo tiempo en que una nueva encuesta arrojó que alrededor del 70% de la gente advierte que su situación empeoró y crecen los que responsabilizan por ello al actual Gobierno, al tiempo que cae la imagen del mandatario.
"Es cierto que el 70% de los argentinos reconocen que están peor", señaló Milei el último domingo. El número que mencionó coincidió casi a la perfección con los datos que se desprenden de la última encuesta de la consultora Zuban Córdoba, publicada el mismo día.
Además de la percepción sobre la situación económica personal, la encuesta de Zuban Córdoba arrojó también que la mitad de los consultados ya le atribuyen mayor responsabilidad a su gestión que a la anterior y que la expectativa a futuro no es buena.
En ese contexto, el Presidente insiste en que "casi la mitad de los argentinos ve una luz al final del camino" como un intento por mantener viva la expectativa de una mejora de la economía tras el ajuste, tema que en el Gobierno saben que es clave para su futuro político y sobre el cual empiezan a encender alertas las últimas encuestas.
Y es que tanto el sondeo de Zuban Córdoba como otro realizado este mes por la consultora CB en la provincia de Buenos Aires señalaron que la imagen negativa del Presidente empieza a ser superior a la positiva.
La encuesta de Zuban Córdoba, realizada entre el 7 y el 9 de marzo con una muestra de 1.500 casos y un margen de error de 2,5%, arrojó que la imagen positiva de Milei se ubica en el 42,3% mientras que la negativa alcanza el 57,3%.
Este dato negativo para Milei coincide con el que arrojó un sondeo de CB Consultora entre el 4 y el 8 de marzo en los 24 municipios del Gran Buenos Aires, con una muestra de 15.224 casos (entre 600 y 681 por distrito) y un margen de error de entre 3% y 4%.
Según el resultado de ese otro estudio, en 21 de los 24 municipios la imagen negativa de Milei es mayor a la positiva. Los mejores números los tuvo en San Isidro (49,4% de positiva contra 44,1% de negativa), Pilar (48,1% contra 45,3%) y Tigre (47,7% contra 47,2%).
En el cuarto lugar de ese ranking de los municipios donde mejor imagen tiene el Presidente apareció Vicente López, pero allí ya empezó a verse que la positiva (46,9%) es inferior a la negativa (48,2%). En tanto, los tres distritos donde peor le fue fueron Lanús (34,2% de positiva contra 59,5% de negativa), Almirante Brown (31,4% a 62,7%) y Avellaneda (30,9% contra 66,1%).
A esto se le suma que también en 21 de los 24 municipios la imagen positiva de Milei cayó, en promedio, unos 3 puntos porcentuales en marzo respecto de la medición que la misma consultora hizo en febrero.
La encuesta de Zuban Córdoba arroja una posible explicación al golpe en la imagen positiva de Milei en la medición de la evaluación de la situación económica y las expectativas de la población en medio de una inflación mensual en descenso pero todavía alta y, sobre todo, de la fuerte caída del poder adquisitivo.
Según este sondeo, el 71,6% de los encuestados considera que su situación económica "empeoró desde que Milei es presidente". El número coincide casi a la perfección con el diagnóstico que realizó el jefe de Estado, quien probablemente haya visto este número o uno similar en alguno de los estudios que encarga por su cuenta la Casa Rosada.
A esto se le suma otro dato que puede ser preocupante para la administración de La Libertad Avanza. Al preguntar a los encuestados "qué gobierno es más responsable por la mala situación económica del país" el 46% señaló a la gestión pasada de Alberto Fernández y Sergio Massa mientras que el 51,7% responsabilizó a la de Milei y Luis Caputo.
Hasta el mes pasado distintas encuestas mostraban que la "herencia" del gobierno anterior para el actual era un factor muy tenido en cuenta en la consideración de la gente sobre la situación económica y ahora, según el sondeo de Zuban Córdoba, eso parece haberse invertido.
Pero el otro dato que puede hacer quizás más ruido en el Gobierno es el referido a las expectativas. Y es que al preguntar a los encuestados cómo cree que estará su situación económica personal dentro de un año el 51,1% respondió "mal" o "igual de mal", mientras que el 41,4% eligió "bien" o "igual de bien".
Sin embargo, esos números no se condicen con los que expuso el Presidente. En una entrevista concedida el último domingo afirmó que cuando asumió el 10 de diciembre "las expectativas de que la economía mejore en los próximos 6 meses llegaban al 20%", mientras que "en enero trepó al 30%, en febrero al 42%, y después del discurso (el 1 de marzo) trepó al 47%".
En este sentido, Milei sostuvo que "es cierto que el 70% de los argentinos reconocen que están peor" y que en el Gobierno lo saben porque están mirando "los indicadores", pero también remarcó que "casi la mitad de los argentinos ve una luz al final del camino" y que "la gente tiene esperanza".
Esos números sobre la expectativa de una mejora de la economía en los próximos 6 meses son los mismos que el Presidente les mostró a sus diputados antes de dar su discurso en la Asamblea Legislativa, durante una reunión en Casa Rosada.
Muestra así que el Gobierno realiza su propio seguimiento sobre la opinión pública y que el tema de las expectativas de la gente es de suma importancia para el Presidente y su equipo. Por eso, ante la aparición de los primeros resultados negativos en algunas encuestas el mandatario intenta mantener viva la esperanza que generó con su triunfo electoral y con los primeros pasos del ajuste.
En el Gobierno entienden que el ajuste y la fuerte recesión que empieza a atravesar el país tiene plafón social porque Milei fue sincero sobre ese aspecto durante su campaña electoral, pero también saben que el apoyo está condicionado a poder mostrar una recuperación de la economía en el mediano plazo.
En este aspecto, la base desde la que Milei espera tomar impulso para las elecciones de medio término que se disputarán en 2025 y que serán fundamentales para robustecer al oficialismo en el Congreso es la caída del índice de inflación mensual.
La baja desde el 20% de enero al 13% de febrero es el eje sobre el cual se mueve Milei para tratar de mantener la expectativa de una mejora económica próxima y, a la par, defender su capital político.
En este sentido, otra encuesta reciente, en este caso de la consultora Opinaia, se diferenció de las otras al marcar que el mandatario cosecha una imagen positiva del 52% y que "el Gobierno está reteniendo la gran mayoría del electorado que lo votó en el balotaje".
Por ello, mostrar una baja en la inflación en los próximos meses es clave para que el Gobierno logre mantener vivas las expectativas de una mejora en la situación económica personal de los argentinos, aunque para ello necesita tiempo.
En ese marco, Javier Milei empieza a reemplazar el latiguillo "no la ven" tan usado en sus redes sociales por muestras de comprensión de la situación económica de los individuos (sobre todo en la golpeada clase media) y pedidos de "paciencia" junto con el señalamiento de una expectativa todavía sólida respecto de la recuperación de la economía. Este punto parece ser la clave para sostener su capital político de cara a las elecciones de medio término.
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