La Gaceta.
Allá por los años 60, cuando Andrés Adolfo Delpero comenzó a vender materiales para construcción en el barrio, con la sola ayuda de un pequeño carro y un par de caballos, no imaginó en lo que se convertiría tiempo después. Pero sus ganas y esfuerzo lo hicieron realidad y hoy el Corralón Delpero es uno de los más completos de Tucumán.
El Corralón fue creciendo a grandes pasos y se posicionó como el comercio elegido para construir de una manera veloz, efectiva y con un gran servicio de logística de puerta a puerta, además de la excelente atención que lo caracteriza.
El local se encuentra en una ubicación privilegiada (avenida Ejército del Norte 142) con acceso ágil y un amplio estacionamiento, lo que facilita el traslado de los materiales. Es atendido directamente por sus dueños, quienes reciben con alegría a sus clientes, y cuentan también con un gran equipo de trabajo dedicado a dar una respuesta rápida y sobre todo personalizada ante cada consulta.
Corralón Delpero es un comercio moderno, que está a completa disposición de sus clientes desde el mostrador hasta en las redes sociales. Recibe todas las líneas de tarjetas y cuenta con créditos personales, apostando al futuro de lo que es el mundo de la construcción en Tucumán y en el norte argentino.
“Es un gran honor y satisfacción para nosotros mantenernos en pie después de seis décadas en servicio como negocio familiar. Hasta el día de hoy, y con mucho trabajo en el medio, el corralón continúa felizmente el legado. Hace ya muchos años estamos comprometidos a ayudarte a hacer realidad tus proyectos y brindamos por muchos años más”, afirman sus dueños.
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