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El Gobierno admite que la inflación se acelera y prepara nuevas medidas

Con un significativo impacto del aumento de la carne, de precios regulados, como las tarifas, y por el movimiento del dólar, la inflación de enero que se publica hoy rondaría el 6%; anunciarían un Repo.


La preocupación crece en el Gobierno. En un año crucial de elecciones presidenciales, la inflación –el principal drama de los argentinos, según las encuestas– no cede. El ministro de Economía, Sergio Massa, uno de los posibles candidatos del oficialismo, no logra aún establecer una trayectoria a la baja clara para los precios –de hecho, se aceleraron en enero– que genere expectativas entre los agentes económicos de que una ralentización es posible en el mediano plazo.


La Casa Rosada y el equipo económico ya admite que el número que el Indec dará a conocer será mayor al 5,1% de diciembre y que la inflación interanual puede seguir cerca de las tres cifras. Economistas creen que el número de enero rondará el 6%.


“Sí, lamentablemente vemos que la cifra [la inflación de enero] está por arriba de la del mes anterior, eso nos preocupa”, afirmó el secretario de Industria, José Ignacio de Mendiguren en una entrevista radial. El asesor presidencial Antonio Aracre, en un diálogo con LA NACION, recalcó que enero y febrero jugaron “una mala pasada” por el impacto de la sequía en el precio de la carne, y dijo que marzo será un mes difícil por el inicio de clases. “En el segundo trimestre del año, tenemos toda la posibilidad de alcanzar ese 4% mensual”, agregó.

El ministro de Economía había prometido semanas atrás que el IPC comenzaría con un tres en abril. Justamente, Massa cuestionó ayer en un anuncio sobre la carne el “mal uso” [politizado] de esa frase y criticó a quienes afirman que “el rebote es un problema”. El ministro dijo que, más allá de la bronca, sigue siendo un desafío bajar la inflación y prometió que en las próximas horas, el Gobierno tomaría más medidas para “estabilizar” la macro y la microeconomía con el objetivo de apuntalar el orden fiscal, la acumulación de reservas internacionales y la “defensa del valor de la deuda”.


Según contaron a este medio, el Palacio de Hacienda anunciaría un repo (mecanismo por el que se emiten bonos y se dan en garantía a un préstamo). Fuentes oficiales contaron que sería con una tasa de un dígito y que iría a las cuentas del Tesoro. “Es más de lo que dicen”, precisaron sobre el monto sin ofrecer, no obstante, una cifra final. Agregaron además que el prestamista será un banco.

El dato de enero

De Mendiguren culpó por la aceleración de la inflación de enero a cuestiones estacionales. Habló particularmente del turismo, que hace –denunció– que los comerciantes “se abusen de los precios”.

Lo cierto es que habría otras cuestiones más estructurales que empujaron los incrementos en las góndolas el mes pasado. Un duro informe de la consultora Eco Go estableció cuatro factores que impulsaron la aceleración. Según la consultora que conduce Marina Dal Poggetto, un primer punto fue que los acuerdos de precios que funcionaron en el fin de año empezaron a “resquebrajarse” a pesar de que Massa acaba de relanzar una segunda versión con un nuevo sendero de aumentos de 3,2% mensual y una nueva canasta congelada.

Las causas de la aceleración

La directora de Eco Go afirmó que la escasez de dólares produjo que las SIRA (los permisos de importación, que funcionaron como quid pro quo con las empresas que firmaron los acuerdos de precios) no se entregaban de manera “fluida”. Esto complicó el cumplimiento de de los acuerdos de precios por parte de los formadores. La situación de las reservas es, de hecho, una luz de alerta importante en 2023, ya que la sequía promete desinflar lo que fue la liquidación de dólares récord del año pasado.

En segundo lugar, se registró una disparada en el precio mayorista de la carne, de entre el 20% y 30% desde mediados de enero. El mismo ya se filtra a la inflación. “Vale recordar que todo el rubro carne pesa casi 9% en el índice, mientras que el índice carne vacuna pesa 6,5%. Es decir, por cada 10% de aumento en mostrador, el impacto en el índice alcanzaría a 0,65 puntos”, estimaron los analistas de Eco Go. Justamente, ayer, Massa presentó un acuerdo de precios y otras medidas para la carne.

Se registró una disparada en el precio mayorista de la carne

En tercer lugar, Dal Poggetto indicó que en el primer mes del año se dieron aumentos en precios regulados acordados con el Fondo Monetario Internacional (FMI). “Aun con ponderaciones bajas en el índice, inciden”, estimaron. Los precios regulados habrían mostrado un alza de casi 8%. Subieron las facturas de luz, gas, agua, colectivos, prepagas y combustibles.


Por último, las cotizaciones de los dólares –el termómetro de la economía argentina– comenzaron a mostrar volatilidades a mediados de enero. Por diferentes razones, subieron el blue, el CCL y el MEP.

Las proyecciones

Para Eco Go, según su relevamiento, la inflación de enero sería de 5,9%, lo que implicaría un anualizado de casi 100%. Se trata de un ritmo menor al anualizado de 135% de julio tras la intempestiva renuncia de Martín Guzmán y el interinato de 24 días de Silvina Batakis en Economía, pero es mayor al 80% de la desaceleración del IPC de noviembre y diciembre.


La semana pasada, el índice de precios de la Ciudad de Buenos Aires marcó un 7,3%, según el relevamiento del gobierno porteño. Fue la peor cifra desde julio de 2022.


Para C&T Asesores Económicos, la inflación de enero fue de 6,3%, la misma variación que prevé la Fundación Libertad y Progreso. La consultora Analytica, en tanto, pronosticó un 5,8%. La semana pasada, la Umet afirmó que “la inflación de los trabajadores” subió a 5,5% y la interanual alcanzó el 98% en el primer mes del año.


FUENTE: LA NACIÓN.

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