top of page
Clipping_wpp.png

Empresas, en alerta por el dólar: a partir de qué nivel se gatillarán mayores subas de precios

  • Foto del escritor: Equipo OB
    Equipo OB
  • 11 jul
  • 3 Min. de lectura

iProfesional.


Por ahora, el Gobierno luce confiado: en el equipo económico están convencidos de que la escalada del dólar mayorista —hasta $1.256 antes del feriado— no tendrá un impacto en las góndolas. Esa suba, del 10% en tan solo 11 jornadas hábiles, no debería causar un daño en el proceso de desinflación, sostienen los funcionarios del área económica. Lo mismo afirman en las consultoras económicas.


De todas formas, la velocidad de esa corrección es seguida de cerca en las empresas líderes. Los industriales, formadores de precios, sostienen que cualquier alza del tipo de cambio repercute en sus costos, vía el aumento de las materias primas.


El lunes pasado, en la reunión de directorio de una de las industrias líderes de la alimentación, se concluyó que la suba del dólar no podría ser trasladada a los precios de los alimentos, al menos por ahora.


Las principales compañías de consumo masivo vienen achicando los márgenes de ganancia desde el año pasado. Habían llegado a un nivel máximo en 2023, en medio de la incertidumbre económica, sin dólares para pagar importaciones y sin un horizonte político claro.


Ese escenario se modificó a lo largo de 2024, pero en el inicio de 2025 comenzó a pesar otra variable: la falta de reacción del consumo.


Las ventas planchadas a nivel minorista ponen un límite contundente a la posibilidad de recomponer los márgenes. Por el contrario, la visión en las empresas es que esos márgenes podrían reducirse aún más si el dólar sube en las próximas semanas.


Todo tiene un límite, por supuesto. Ese límite, según distintas consultas realizadas por iProfesional entre compañías líderes del consumo masivo, estaría actualmente en torno a los $1.300. Ese sería el umbral que podrían convalidar sin lanzar nuevas listas de precios.

“Obvio que estas señales del dólar son para monitorear, pero con la fluctuación entre bandas hay que aprender una dinámica nueva e ir viendo si esto se convierte en una tendencia”, señaló la directora de una de las compañías más grandes del rubro.


“El punto central hoy, más allá de que esta vez el movimiento del dólar es más brusco que otras veces, radica en que las ventas están muy flojas. No hay chances de lanzar una lista nueva si ya sabemos que el mercado no la va a convalidar. Es más probable que perdamos mercado que que recuperemos o mantengamos los márgenes”, apuntó el gerente de otra empresa alimenticia.


Precio de los alimentos, un ancla de la inflación

El rubro de los alimentos juega a favor de la estrategia del Gobierno para mostrar un IPC más bajo. Fue clave, de hecho, en la medición de mayo, que marcó apenas 1,5%.


Para junio, las principales consultoras estimaron una inflación de entre 1,8% y 2,0%, pero con los alimentos subiendo unas décimas por debajo del promedio.


El último índice de precios de la Ciudad de Buenos Aires confirmó esa tendencia: frente a una inflación general del 2,1% durante junio, el rubro de alimentos subió 1,6%. Y no se trata exclusivamente de la carne, que se mantiene en precios similares a los de marzo. El resto de los alimentos —y también las bebidas— siguen en niveles parecidos a los del cierre del primer trimestre del año.


Los empresarios del sector asumen que el tipo de cambio se mantendrá dentro de una banda de entre $1.200 y $1.300. Tienen sus costos calculados con base en ese rango; por eso siguen con atención los movimientos recientes del mercado cambiario.

Nadie cree que el dólar vaya a tener una corrección más pronunciada, pero lo cierto es que el foco está puesto ahí en relación con los precios de los alimentos.


En el equipo económico están convencidos de que la inflación de este mes comenzará con “1”. Incluso, los funcionarios apuestan a que el IPC se mantenga en estos niveles al menos hasta las elecciones de octubre.


El ministro Luis Caputo y sus principales colaboradores creen firmemente que el proceso de desinflación volvió para quedarse.

Comentarios


bottom of page