Naciones Unidas.
Acerca del 35 por ciento de los residuos de vertederos es generado por la industria de la construcción, con millones de toneladas de escombros de cada uno son desechados al año alrededor del mundo. Similarmente, cerca de un billón de llantas de automóvil se convierten en desecho cada año. La mayoría de las llantas terminan en vertederos causando una gran variedad de problemas. Con respecto a eso, la perspectiva publicada por el Programa de las Naciones Unidas por el Medio Ambiente (PNUMA) explica que “cuando cantidades significativas de residuos urbanos y de materiales industriales sólidos son tirados o quemados al aire libre, el impacto perjudicial en el aire, el agua superficial y subterránea, el suelo y los ecosistemas marinos y costeros, así como de forma indirecta en la salud pública, pueden ser severos”.
Por otro lado, el concreto es un material ampliamente usado, pero que tradicionalmente consume recursos naturales como el cemento, arena, y rocas, afectando significativamente al medio ambiente. Una posible alternativa para reducir los residuos y ahorrar recursos naturales es reciclar los residuos provenientes de la construcción y demolición, así como el residuo de llantas de caucho, en el concreto. Reciclar materiales provenientes de residuos para reemplazar el agregado en el proceso de producción de concreto es usualmente considerado una alternativa para superar problemas relacionados con los residuos. Sin embargo, ocurre una caída por arriba de un 85% en la resistencia del concreto cuando se usan llantas como agregados en la producción del concreto.
La técnica para lograr un concreto hecho a base de caucho con propiedades del concreto tradicional ahora ya está disponible. Gracias a un equipo de la Escuela de Ingeniería de la RMIT University, una institución miembro de las Naciones Unidas por el Impacto Académico (UNAI) en Australia, estamos más cerca de reducir la cantidad de residuos de construcción y llantas de caucho en vertederos. Inspirados por el problema mundial de los residuos, el equipo desarrolló una nueva tecnología para manufacturar concreto hecho de materiales reciclados, con un producto final más duradero y resistente que el tradicional. Este nuevo método para la colación de cemento para productos prefabricados incrementa su fuerza por arriba de un 35%.
El profesor Yufei Wu condujo el desarrollo de la Tecnología de Procesamiento de Concreto de Caucho (RCP-Tech, por sus siglas en inglés) y dijo que éste ofrecía una solución eficiente y barata. “Esta tecnología puede mejorar significativamente la fuerza, dureza, y durabilidad de cualquier material de concreto, e incluso del concreto ordinario. La tecnología puede también ahorrar la cantidad de cemento y los costos del material total comparados con el concreto convencional con concreto de la misma fuerza”, comentó. El método combina una mezcla de agregados gruesos y finos de residuos de llantas de caucho, cemento y agua.
El resultado de esto es entonces comprimido hasta su volumen mínimo usando presión en moldes diseñados especialmente para eso. "Al mejorar las propiedades de los residuos reciclados sin utilizar materiales adicionales, hemos desarrollado una solución viable y práctica que resuelve los problemas de rendimiento relacionados con el reciclado de residuos en el concreto", explicó el profesor Wu. En este estudio, se utilizó arena de río, agua corriente y cemento convencional para preparar todas las mezclas de hormigón que se analizaron como parte de este proyecto de investigación, centrado en la fabricación de concreto ecológico y "verde" para una industria de la construcción mucho más sostenible.
Como se señala en el documento Políticas de apoyo a la industria ecológica, publicado por la Organización de las Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial, existe en realidad una notable y "creciente demanda de servicios y productos orientados hacia tecnologías más limpias, reducciones del riesgo medioambiental y gestión de recursos (incluido el reciclado y la recuperación de recursos)". Por lo tanto, los resultados de este proyecto de investigación se alinean con el objetivo no sólo de crear una industria de la construcción más conciencia medioambiental, sino también de crear un impacto real en la gestión de los residuos, que es una preocupación en todo el mundo.
El Dr. S.M.S. Kazmi, investigador postdoctoral del RMIT y cocreador de RCP-Tech, declaró que el equipo de ingenieros está intentando asociarse con la industria de los prefabricados de concreto para poder fabricar y probar productos como bloques, barreras de carretera, paneles de pared, vigas y losas. "La tecnología puede aplicarse fácilmente en la industria de los prefabricados de concreto y requiere muy pocos cambios en los procesos de fabricación existentes, con la adición de un solo paso adicional en la fase final de la producción", dijo. Este sería también un ejemplo destacado de colaboración entre el mundo académico y el sector industrial, teniendo en mente la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.
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