El Confidencial.
El reino saudí continúa con sus planes de desarrollar una megalópolis futurista que aspira a tener algunas de las construcciones más ambiciosas de la historia de la civilización. Su promotora, Neom, acaba de anunciar el inicio de la construcción de las torres Epicon, dos rascacielos gemelos de 225 y 275 metros respectivamente, que se convertirán en uno de los elementos principales de su faraónico proyecto.
El inicio de las obras lo ha confirmado en exclusiva la revista dubaití Middle East business intelligence (MEED). El medio asegura que la empresa Ammico Contracting, con sede en Doha, Catar, ya ha comenzado con los trabajos de cimentación.
En estos trabajos preliminares también participarán la empresa saudí Al Ayuni Investment Company y el contratista turco Limak Holding que realizarán trabajos de habilitación, perforación de pozos verticales e inclinados, un túnel de acceso a la construcción mediante perforación y voladura, trabajos de excavación en la cima de la montaña y otras obras asociadas, según apunta MEED.
Rascacielos gemelos ‘imposibles’
Este espectacular diseño corre por cuenta del estudio internacional, 10Design. Las dos torres tendrán una altura de 225 y 275 metros respectivamente y albergarán 41 hoteles y residencias de lujo.
Los arquitectos no han explicado cómo harán las estructuras voladas horizontales. (10Design)
Los rascacielos llevan un revestimiento de acero y aparecen interconectados por niveles horizontales que desafían la gravedad (todavía no han explicado como los mantendrán en pie) y que contendrán, entre otros espacios, una piscina al aire libre.
Además de los rascacielos, la región Epicon también tendrá un complejo ecoturístico homónimo con 120 habitaciones y 45 villas en la playa. Entre los servicios que ofrecerá habrá un club de playa, un spa y restaurantes.
"Diseñado como una puerta al futuro, Epicon ofrece la oportunidad de escapar del estrés cotidiano", explican los promotores de Neom en un comunicado.
Los problemas de Neom
Que todos estos proyectos se lleguen a construir dependerá de la habilidad de Arabia Saudí para financiarlos, algo que será difícil más allá de 2030, según opinan varios expertos en un reciente artículo del Wall Street Journal.
El medio estadounidense asegura que el efectivo del fondo que el reino ha creado para sufragar estas faraónicas obras se redujo aproximadamente en tres cuartas partes (hasta unos 15.000 millones de dólares) en el último mes. Esto, dice el diario económico, sería el nivel más bajo desde diciembre de 2020, que es cuando el fondo empezó a compartir sus datos.
Por otro lado, Arabia Saudí ha arrancado el año con dos grandes ofertas de deuda pública y, según explica el WSJ, también ha recurrido al endeudamiento para poder mantener abierto el grifo de gasto. Sin embargo, la caída del precio del petróleo unido a la subida de los intereses se lo va a poner difícil.
Además, Neom es un controvertido proyecto que se ha enfrentado a las críticas de organizaciones de derechos humanos como ALQST y el Consejo de Derechos Humanos de la ONU debido a las acusaciones de desalojos forzosos y ejecuciones inminentes. Aunque Arabia Saudí las ha negado.
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