Cuánto hay que invertir en una franquicia barata del rubro construcción

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Newconcret, la unidad de negocios especializada en hormigón pulido del Grupo Lonati, inicia su expansión en Argentina con un modelo de franquicias. Con más de 30 años de experiencia en el rubro, la marca combina conocimiento técnico, provisión de máquinas e insumos, y un acompañamiento constante a sus clientes. Ahora busca replicar su fórmula de éxito sumando franquiciados que puedan ofrecer sus productos y servicios en distintas regiones, bajo un sistema probado y con alta demanda en industrias, empresas y emprendimientos de todo tipo.

Aunque el nombre Newconcret se popularizó en los últimos años como sinónimo de pisos industriales perfectamente pulidos, su historia se remonta mucho más atrás. La empresa nació como una unidad de negocio del Grupo Lonati, que desde hace más de tres décadas brinda soluciones en limpieza, mantenimiento y tratamiento de superficies, además de comercializar equipos y ofrecer asesoramiento técnico. Hace quince años, impulsados por la creciente demanda en el mantenimiento de pisos de hormigón y la pérdida progresiva del oficio del pulidor, decidieron profesionalizar ese segmento.

"La idea nació del trabajo en plantas industriales, donde notábamos que uno de los principales problemas era el estado de los pisos. Empezamos a aplicar nuestra experiencia y a importar insumos y máquinas. Luego comenzamos a diseñarlas nosotros mismos para fabricarlas en China, y desarrollamos productos químicos y cementicios en Bragado, con materia prima argentina", cuenta Pablo Lonati, fundador y director de Newconcret. Así nació un sistema propio, completamente argentinizado, que hoy abastece a compañías como Essen, Aceitera General Deheza, Durlock, Bagley, Quilmes, Ford, Arcor y Aluar, entre muchas otras.

"En muchas plantas automatizadas, los pisos tienen que ser perfectos. La mercadería no puede caer de los racks, los operarios no pueden lesionarse. El piso es sumamente importante, tanto como el techo", advierte Lonati.

Además de brindar servicios de pulido y recuperación de pisos, la empresa se consolidó como líder en formación: ya capacitó a más de 300 pulidores en Argentina, Chile, Uruguay, Paraguay, Ecuador y Bolivia. "Nosotros lo llamamos el ‘pulidor 2.0’. Buscamos revalorizar un oficio y ponerle tecnología. Creamos una comunidad de profesionales con la que compartimos conocimientos y trabajos", explica.

Con ese mismo espíritu de crecimiento y formación, la empresa decidió apostar por el modelo de franquicias. "La franquicia es una forma de multiplicar lo que hicimos nosotros. Queremos que en cada región haya una persona capacitada para ofrecer todo lo necesario para un piso de hormigón, desde el nylon que se coloca durante la construcción hasta el último producto desengrasante o sellador, ya sea en ámbitos domésticos, institucionales o industriales", resume Lonati.

El proyecto se lanza de manera gradual, con foco en la calidad del acompañamiento y el éxito sostenido de cada nuevo punto. Las primeras conversaciones ya avanzan en ciudades como Rosario, Tucumán y Puerto Madryn. "No queremos crecer a lo loco. Nos interesa que cada franquicia sea un caso de éxito, porque lo que está en juego es nuestro nombre y nuestro prestigio", afirma Lonati. El objetivo es alcanzar entre 15 y 20 franquicias activas en el primer año.

El diferencial de Newconcret, aseguran desde la empresa, es la contención: "No vendemos productos, vendemos soluciones. El que se sume, lo hará con el respaldo de un sistema probado, con asesoramiento permanente y clientes reales a los que puede empezar a atender desde el primer día".

Newconcret ofrece un modelo escalable que se puede empezar con u$s25.000

El modelo de franquicias fue diseñado para adaptarse tanto a profesionales ya vinculados con la arquitectura, la construcción o la gestión de servicios, como a emprendedores sin experiencia que buscan desarrollar un oficio con salida laboral. "Tenemos dos propuestas, una orientada a profesionales o empresas del sector que ya tienen estructura y quieren escalar, y otra pensada para emprendedores que pueden empezar con una inversión mínima", explica el empresario.

En todos los casos, la empresa brinda acompañamiento desde el primer día, soporte técnico, capacitación permanente y acceso a la red de contactos y clientes que construyó a lo largo de más de 30 años de trayectoria.

Para quienes deseen operar ofreciendo únicamente el servicio de pulido sin contar con un local comercial, el ingreso parte desde los u$s25.000. Esta modalidad está pensada para comenzar con herramientas básicas —como pulidora, aspiradora, insumos y productos químicos— y escalar progresivamente en estructura, volumen de ventas y rentabilidad. "Diseñamos un modelo escalable, pensando en que alguien que invierta en dos o tres máquinas pueda ir ampliando su oferta y negocio a medida que vaya posicionándose y desarrollándose en su zona", detalló Luz Crespo, directora de Franmarket, la consultora encargada del desarrollo y la comercialización de las franquicias Newconcret.

En cambio, quienes opten por montar una franquicia integral con local comercial, estructura completa y todas las líneas de negocio, deberán contemplar una inversión inicial cercana a los u$s85.000. Ese monto incluye el canon de entrada, la adecuación del local —a partir de 50 metros cuadrados—, uniformes, un stock inicial de insumos, maquinaria para la venta y para la prestación de servicios.

En todos los casos, se otorga un territorio exclusivo y los franquiciados deben contar con movilidad propia —auto o camioneta—, idealmente ploteada con la imagen de la marca. "No solo posiciona, también genera consultas y atrae nuevos clientes", explican desde la compañía. La instalación de una oficina física no es un requisito excluyente para comenzar, pero sí se recomienda a medida que se consolida el negocio.

El sistema contempla el pago de una regalía mensual equivalente al pulido de 30 metros cuadrados. A cambio, el franquiciado accede a una marca consolidada, procesos operativos definidos, soporte continuo y una red profesional activa que lo respalda.

Una de las mayores ventajas del modelo es que cada una de las unidades de negocio —venta de insumos químicos, productos cementicios, comercialización de equipos y prestación de servicios— es rentable por sí sola. Esto permite que cada franquiciado adapte su crecimiento según sus recursos y objetivos: puede empezar vendiendo insumos, incorporar más adelante maquinaria, y luego capacitar personal para brindar servicios más complejos.

Además, la empresa garantiza la provisión de todos los insumos necesarios para operar. Los productos químicos se fabrican en la planta que Newconcret tiene en Bragado, y las máquinas se producen en China bajo especificaciones técnicas diseñadas por el equipo de ingenieros de la empresa. "En los peores momentos de importación nunca nos quedamos sin stock. Hoy tenemos insumos para abastecer la demanda de un año entero", asegura Lonati.

Otro factor clave es el posicionamiento cada vez más sólido de la marca. En el ecosistema de las franquicias, Newconcret es única en su rubro y prácticamente no tiene competencia directa. El prestigio construido a lo largo de los años, respaldado por una cartera de clientes de primer nivel, convierte a la empresa en una propuesta aún más atractiva.

Para quienes buscan un negocio rentable, técnico, con respaldo y sin competencia directa, las franquicias de Newconcret representan una oportunidad concreta. "No alcanza con vender; hay que saber escuchar al cliente y ofrecer una solución. Eso es lo que enseñamos y eso es lo que vendemos", cierra el director de la compañía.