Infobae.
Un emprendimiento inmobiliario en Rosario juntó a dos campeones del mundo en Qatar 2022 nacidos en esa ciudad. Lionel Messi y Ángel Di María, se unieron a un grupo desarrollador para invertir en un proyecto de real estate que demandará una inversión de 7 millones de dólares cuyas obras se pondrán en marcha antes de fin de año y estará concluido a fines de 2025.
La apuesta en ladrillos pone en marcha la sociedad de la Pulga y Fideo, esta vez fuera de la cancha. Ambos futbolistas se unieron como inversores y protagonistas en Carrasco M, un condominio premium ubicado en Guayaquil al 200, en el codiciado norte de Rosario, con vistas panorámicas al río Paraná.
Este desarrollo surge de la alianza estratégica formada entre el Grupo Mktarq, dirigido por el arquitecto Manuel Ongaro y Adrián Esperón, al que se unió el padre de la estrella, Jorge Messi, en representación de Limecu SRL. La alianza dio como resultado la conformación de un fideicomiso que llevará adelante el emprendimiento. La comercialización estará a cargo de Di María Negocios Inmobiliarios, cuya titular es Vanesa, la hermana del futbolista.
Ongaro destacó a Infobae que “Messi y Di María, nacidos en la misma ciudad y con historias deportivas en clubes rivales, se unen en una iniciativa que va más allá de las ganancias. Su inversión en la ciudad generará empleo directo e indirecto, con un enfoque en el trabajo justo”.
La mayoría de los ambientes dan hacia el río Paraná
La sociedad entre Messi y Di María no se detiene en este emprendimiento y ya tiene planes un segundo proyecto. “Una vez iniciadas las obras del desarrollo ubicado en el barrio de La Florida comenzarán las de Tucumán M, una torre de 15 pisos de viviendas que comparte el frente con un casa declarada con valor patrimonial por la Municipalidad de Rosario de uso comercial que se edificará en Tucumán al 2000, a metros del Boulevard Oroño y el río Paraná”, concluyó Vanesa Di María.
El río protagonista
El desarrollo se encuentra a sólo 15 minutos en auto, bordeando la costa ribereña del Paraná, del Puerto Nuevo, otro de los emblemáticos puntos de desarrollo de la ciudad, zona de gran auge inmobiliario en los últimos 20 años. También está próximo al centro rosarino al que se llega a través de la Avenida Carrasco.
“Se ubica en el norte de la ciudad, como un enorme balcón al río emplazado sobre la barranca, en un barrio muy tradicional de Rosario, cercano a la zona de clubes y playas. A metros del Puente Rosario/Victoria, importantísima conexión con el resto del Litoral argentino”, dijo a Infobae Vanesa Di María.
El proyecto contempla unidades equipadas con materiales de alta calidad, valorizando los espacios verdes comunes y en la barranca al río Paraná.
Con materiales resistentes en mesadas de cocinas y baños, ambientes integrados en algunos casos como cocinas, comedor y living, con foco en el concepto abierto.
Ofrecerá 6 triplex premium (desde 465 m2) de tres dormitorios con terrazas, solárium y jacuzzi. Dos triplex (desde 168 m2) de dos dormitorios con terrazas, solárium y jacuzzi. Más 8 dúplex (desde 127 m2)de un dormitorio en suite con terrazas, proporcionando privacidad y vistas expansivas y 8 monoambientes (de 53 m2) con patios privados, fusionando el interior y el exterior en un espacio armonioso.
Además tendrá 28 cocheras privadas en subsuelo para asegurar la conveniencia y seguridad de los residentes. Y entre los amenities, espacio de coworking, “algo que la demanda prioriza para trabajar vía remota y no puede faltar en los proyectos contemporáneos”, añadió Ongaro.
También dispondrá de gimnasio, seguridad y Salón de Usos Múltiples, más bicicleteros. La superficie total del proyecto es de 5.137 metros cuadrados y se estima concluir a fin de 2025.
Según lo averiguado por Infobae en plataformas especializadas en real estate que relevan el mercado rosarino el valor de las viviendas se estima que rondará los USD 2.000 por metro cuadrado.
Así se verán los espacios de circulación comunes en el emprendimiento que se concluiría para fines de 2025
El público joven, familias con hijos pequeños y matrimonios que se retiran de la vida laboral se encuentran entre quienes pueden ser los posibles compradores de unidades allí. Habría usuarios finales y algunos inversores que destinan ahorros en el ladrillo
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